Es un hotel muy lindo, está súper bien cuidado y limpio; el personal es realmente amable.
La alberca es muy pequeña pero con buena temperatura, le ponían químicos en la mañana así que había que esperar hasta después de las 10 am para poder entrar y las toallas son un tema hay que estar pidiéndolas, en una ocasión pedí un par de toallas para mí esposo y mi hijo que estaban en la alberca y me acompañaron y tuve que enseñar quienes eran para que me las dieran.
Pero bueno, en general la pasamos bien y sí recomendamos el hotel.