Ojo, las fotos no corresponden a lo real. Positivo: la cercanìa al ADO, que la tv/cable y wifi funcionan muy bien, que hay agua caliente y el señor que se queda en la madrugada buena onda, nos abrìa siempre que llegàbamos tarde. De ahì en fuera la verdad està muy viejo y deteriorado. Uno entiende que hay precios accesibles pero no por eso vas a ofrecer al cliente un muladar y un servicio de porquerìa. Se ve que al dueño de este lugar lo que menos le preocupa son los clientes pues la habitaciòn en general es un asco. Muy sucio. Entrando a la habitaciòn encontramos una cucaracha muerta. Pensè en pedir cambio de inmediato pero mi esposo me dijo que al entrar oliò mucho a insecticida, asì que lo que hubiera ya se habìa muerto y asì fue. Ni pensar en dormir abajo de las cobijas pues las sàbanas rotas, viejas y se ven asquerosas. Lo mismo con el lavabo y la bañera ni se diga, se sentìa pegajosa de lo sucia que estaba (me arrepentì de no llevar chanclas). Paredes sucias, almohadas puerquìsimas, la cortina de la bañera con muchìsimos puntos negros por la humedad, la làmpara del baño rota, poca luz pues solo hay una ventanita chiquita... El joven que nos atendiò pues X, exigentito para el mugrero que es. La chica del aseo se pone a cantar las del Buki a las 10am (de por sì lo alucinamos y que nos despiertan con sus canciones) asì que si te desvelas obvio te despierta; y yo no se què limpia o què cambia porque la verdad todo està horrible. En la vida me vuelvo a quedar aquì.