La habitación es muy bonita, el hotel está en el corazón del centro de Querétaro y aunque no cuentan con estacionamiento propio, sí tienen convenio con uno que se encuentra a dos cuadras y fue gratuito(si traen maletas grandes sí será un poco pesado el ir de un punto a otro). Los únicos puntos donde quisiera hacer observaciones, es en las toallas de baño que están visiblemente desgastadas y rasgadas de las orillas, las paredes parecen ser muy delgadas porque se oía por la mañana mucho ruido de la habitación de arriba, el agua caliente solo salía tibia y nunca se logró conectar a la red la pantalla, como amenidades solo dejan una jarrita con agua y dos vasos, la secadora y control de pantalla te la entregan en una curiosa bolsita de mandado de plástico para entregar en el check out (bonito detalle). En general es un lindo lugar para hospedarse.